Resolución de conflictos en el Ámbito Familiar, Civil, Penal y Accidentes de Trafico (Indemnizaciones según nuevo Baremo).
La Mediación es un método voluntario de gestión de conflictos, que incluye a un tercero neutral –el mediador– con la función de ayudar a que las partes involucradas en un conflicto puedan negociar desde la colaboración, una resolución del mismo satisfactoria para todos.
Eso mismo trasladado al ámbito familiar hace que la mediación en procesos tales como separación, divorcio, parejas de hecho, reparto de herencias, cuidado de personas mayores o cualquier otro conflicto familiar, cree un espacio en el que es posible escuchar al otro y luego tomar decisiones para llegar a acuerdos que faciliten gestionar los problemas de forma no contenciosa.
También se consigue en el ámbito Civil, entre deudor y acreedor en la reclamación de una deuda o cumplimiento de un contrato, y en el ámbito Penal y Accidentes de Tráfico, entre responsable y victima, al objeto de que esta última se sienta no solo reconfortada con la reparación de los daños sufridos, si no también escuchada y respetada.
La Mediación, por tanto es un proceso voluntario y estructurado en el cual el mediador/a profesional experto, ayuda a las partes a resolver los desacuerdos que tengan, creando un espacio que facilite a las personas implicadas la negociación hasta alcanzar una solución percibida por ellos como satisfactoria y al logro de su cumplimiento.